INTRODUCCIÓN

Cada año México recibe millones de turistas y la oferta que se ofrece abarca una amplia gama de modalidades turísticas, la más conocida por todos; denominada de sol y playa, eclipsa al resto de modalidades como la cultural, la deportiva, la rural, el ecoturismo y el turismo sostenible. Actualmente es necesario denominar al turismo sostenible como un objetivo común y no como un sector turístico.

Según la OMT (Organización Mundial del Turismo), el Turismo sostenible es “un modelo de desarrollo económico concebido para mejorar la calidad de vida de la comunidad receptora, proporcionar al visitante una experiencia de elevada calidad y mantener la calidad del medio ambiente del que tanto la comunidad receptora como los visitantes dependen”, lo que da el entendimiento de que éste debe ser adjetivo a cualquier otro proceso y que el turismo, es una importante actividad económica con grandes implicaciones sociales, ambientales y económicas.

El turismo sostenible surge así entonces como una respuesta fundamentada en principios éticos y colectivos que implican la utilización de los recursos naturales y culturales a la hora de planificar y ofertar el turismo, y cuyos beneficios económicos generados optimizan las condiciones de todos los sectores que se ven involucrados en el proceso, además de que puede mejorar la relación del medio ambiente con el ser humano.